El colgadero fue un proyecto instalativo itinerante en la ciudad de Bogotá propuesto dentro del marco del colectivo artístico Mezcoliche. El colgadero se concibió como un dispositivo movil que irrumpia en espacios públicos de la ciudad cómo un medio de intercambio o trueque en principio entre objetos que los artistas miembros del colectivo creamos, en base a la estética de la cultura criolla americanizada caracteristica de nuestro contexto cultural. Objetos que hacian alusión al fenómeno de lo chiviado, lo hibridado entre el imaginario local y la idealización de lo foraneo. Estos objetos estaban disponibles para que transeuntes de la ciudad los adquirieran a cambio de dejarnos algun objeto o experiencia que trajeran consigo. Luego estos objetos también estaban disponibles para que circularan y fueran también sujeto de intercambio.